CODICES

     
 

El Códice Ixtlilxochitl

En realidad, el Códice Ixtlilxochitl, no se trata de un solo documento, sino de tres, distintos y separados, con diferentes orígenes, reunidos en un solo volumen.
La primera parte consta de 11 hojas, la cual contiene pinturas de estilo prehispánico y textos explicativos en español. Trata, principalmente, de las 18 veintenas del año nahua y pertenece a un grupo de documentos coloniales (el llamado Grupo magliabechiano) constituido por una serie de copias de un documento original perdido.
La segunda parte, de seis hojas, contiene una serie de pinturas de alta calidad, pero muy influidas por el estilo europeo.
Las diez hojas que forman la tercera parte son copia de un texto de Bernardino de Sahagún que se ocupa, nuevamente, de las 18 veintenas del año nahua.
La copia está escrita de puño y letra de Ixtlilxochitl. Don Fernando trató de establecer una correlación entre el tonalpoalli, el cempoallapoalli y el calendario europeo.
El códice Ixtlilxochitl es solamente una pequeña parte de lo que fue la colección más extensa de documentos antiguos que jamás ha existido en México. La historia de esta colección es larga, desde su creación por don Fernando de Alva Ixtlilxochitl, descendiente de los tlatoani de Texcoco, alrededor de 1600, hasta su dispersión en el siglo XIX. Se relacionan, también con su historia, los nombres de los grandes coleccionistas Carlos de Sigüenza y Góngora, Lorenzo Boturini Bernaducci y Joseph Marie Alexis Aubin.

Geert Bastiaan van Doesburg

imágenes del códice : Adeva / Fondo de Cultura Económica